El Oktoberfest (Fiesta de Octubre), la fiesta cervecera más conocida a nivel mundial de Alemania, celebrándose por todo el mundo, en cada lugar a su manera, y en la que los cerveceros disfrutan de miles de litros de cerveza, comida y actividades.

Cabría pensar que esta fiesta tan popular tiene sus orígenes en alguna feria de ganado o de recogida de cosecha, pero no, su origen está en una boda y una carrera de caballos.  El 12 de Octubre de 1810 el príncipe Luis de Baviera se casó con Teresa de Sajonia-Hildburghausen en la ciudad de Múnich. Sus ciudadanos fueron invitados a los festejos, que duraron 5 días, en los campos frente a la muralla de la ciudad, bautizados como Theresenwiese (Prado de Teresa), en honor a la princesa.

Como clausura de los festejos, se celebró una carrera de caballos que agregó a la multitud y tuvo tal éxito que se decidió repetir al año siguiente, acompañándola de una feria agrícola. Esta decisión es la que nos ha traído a nuestros días el Oktoberfest.

Actualmente la fiesta se celebra de forma distinta a la original. La feria agrícola se realiza cada cuatro años y las carreras de caballo dejaron de celebrarse en 1960.

Curiosidades sobre el Oktoberfest

Comienza en Septiembre

En realidad la fiesta comienza en septiembre y no en octubre como cabría esperar. Desde su origen, a lo largo de los años y de forma sucesiva, se fue alargando los días de celebración, adelantándose a Septiembre para aprovechar los días más largos y calurosos.

Actualmente se celebra desde el primer sábado después del 15 de Septiembre y como mínimo hasta el 3 de Octubre, Día de la Unidad Alemana. La fiesta puede tener de 16 a 18 días, según el calendario del año en curso.

La fiesta queda inaugurada cuando el alcalde pincha con un grifo el primer barril a golpe de martillo y al grito de “O ‘zapft is” (Está abierto).

Solo cerveza de Múnich, por favor.  

Aunque nosotros bebamos cualquier tipo de cerveza cuando celebramos nuestro particular Oktoberfest, en Múnich las cosas son distintas, aplicándose unas reglas estrictas para el consumo de cerveza.

Sólo se puede servir un tipo de cerveza, la Oktoberfestbier, que son las cervezas elaboradas dentro Múnich, que cumplen con la Ley de  Pureza Alemana de 1516, es decir, elaboradas solo con agua, cebada malteada y lúpulo (añadiéndose en 1906 la levadura) y que tienen sobre un 6% de alcohol.

Son cervezas de estilo marzën, cervezas lager de baja fermentación que se producen en primavera para ser consumidas en otoño.

Las seis cervecerías que cumplen estos requisitos son: Augustiner Bräu, Hacker-Pschorr, Hofbräu München, Löwenbräu y la más conocida Paulaner.

Cervezas únicas en jarras únicas.

 Las cervezas se sirven desde 1892 en Maß, unas jarras de vidrio con una gran asa que de por sí pesan 1 kilo. Tienen una capacidad de 1 litro, por lo que llenas de líquido, ¡pesan 2 kilos!. Y cuidado con intentar llevarse una de recuerdo, está prohibido y si te pillan te llevas una multa a casa.

No sólo hay cerveza

Aunque la cerveza es la protagonista principal, en el festival se puede disfrutar también de la comida bávara como los würstl (salchichas), bretzel (lazo de galleta salado) o knödel (bolas de masa hervida con varios ingredientes), entre otros.

También se disfrutan de actividades como el desfile de trajes tradicionales, donde las mujeres lucen sus vestidos típicos llamados dirndl y los hombres sus pantalones tradiconales lederhosen. Debes saber que si la mujer lleva el nudo del delantal a la izquierda, su corazón está libre, pero si lo lleva a la derecha ya no hay nada que hacer, su corazón está ocupado.

Ahora ya sabes cómo disfrutar de tu propia Oktoberfest al puro estilo alemán.

Y por la cerveza no te preocupes, llámanos que nosotros te la servimos. ¡Prost!.